Fusilamiento de Miculax

La historia del primer asesino serial de Guatemala

En los libros de la historia oscura del país figura el nombre de José María Miculax Bux como el primer asesino en serie.

Este hombre, entre febrero y abril del año 1946, dio muerte en complicidad con su primo Mariano Macú Miculax, a entre 14 y 15 niños y adolescentes, según los registros oficiales.

Estos hechos lo catapultaron como el primer asesino en serie capturado, enjuiciado, sentenciado y ejecutado en Guatemala.

Miculax nació en el año de 1925, era un joven jornalero de 21 años, migrante de Patzicía, Chimaltenango, y al momento de su muerte tenía dos hijos, Juana Bux y Enrique Miculax.

Según los registros oficiales y textos de la época, después de abusar sexualmente de sus jóvenes víctimas, las asfixiaba utilizando una cuerda con la que ataba las manos y el cuello.

En esa época, este psicópata creó un ambiente de zozobra y temor en el país, lo cual obligó a todas las fuerzas de seguridad emprender su búsqueda y captura.

Su primer víctima fue Enrique Sactic Cuyuch, de 14 años, quien vivía en San Pedro Sacatepéquez y había llegado a la ciudad capital para vender leña; su cuerpo apareció el 23 de febrero de 1946.

A Enrique y le siguieron el 15 de marzo Oscar Emilio López, de 12 años; el 28 de marzo Cesar Augusto Bolfovich, de 13 años, y el 5 de abril un niño, de aproximadamente 11 años, el cual nunca fue identificado y se enterró como XX el mismo día.

ASÍ OPERABAN

Según el criminalista, Ricardo Mendoza, el modus operandi regular de los primos Miculax era encontrar a los menores cerca de barrancos. Los convencían de acompañarlos para mostrarles conejos y cuando los niños se agachaban, los dominaban con fuerza, los ahorcaban con lazos o cables para después abusar sexualmente de ellos.

A finales abril de 1946, tras la descripción proporcionada por una anciana, las fuerzas de seguridad logran capturar a Miculax y posteriormente, en Antigua Guatemala a su primo Mariano.

José María Miculax confesó ante el Juez Quinto de Paz sus crímenes, señalando a Mariano como su cómplice, este a su vez, negó los hechos pero tras un careo las autoridades notaron las inconsistencias y lograron hallarlo culpable.

Varios niños fueron llamados por las autoridades para realizar la identificación, todos aquellos que habían logrado escapar tras ser perseguidos con una cuerda por los sindicados. Además, la mujer que había dado previamente una descripción aportó un dato importante indicando que Miculax tenía un problema al caminar que lo hacía notorio. Durante el juicio, el acusado condujo a la policía al lugar donde se encontraban dos cadáveres que aún no habían encontrado.

Para juzgar al asesino y a su primo se promulgó legislación especial que abreviaba los procedimientos, es decir el decreto 235 del Congreso de la República bautizado popularmente como la Ley Miculax, la cual estipulaba que si los acusados fueron capturados el 26 y 27 de abril de 1946, el 18 de junio del mismo año, José María Miculax Bux, era sentenciado a la pena capital y su primo Mariano Macú Miculax a treinta años de cárcel, después habiendo pasado por todas las instancias legales, Miculax enfrentó al pelotón de fusilamiento el 18 de julio de 1946.

Después de su ejecución y a petición de la Facultad de Medicina de la Universidad de San Carlos de Guatemala, al cadáver de Miculax se le quitó la cabeza para hacer los estudios que identificaran el origen de su criminalidad, sin embargo, su cabeza desapareció en los años 90 y fue reportada como robada.

Fuentes: Guatemala de ayer; blog asesinos en serie bios y relato gt

Foto: Infoguat