Fernando Castro Molina

Construcción del Protocolo de Atención Integral al Migrante de Guatemala, una deuda pendiente de autoridades por años

Ha pasado el tiempo para discutir y realizar evaluaciones de protocolos de trabajo interinstitucionales que forman parte del Consejo de Atención y Protección (CAP), siendo una deuda con los migrantes guatemaltecos y sus familias por parte de autoridades vinculadas a la temática migratoria.

De acuerdo a lo que establece el Código de Migración de Guatemala y la instrucción del CAP, se debe haber realizado con mucho tiempo atrás, el proceso de la construcción del Protocolo de Atención al Migrante en el país.

En las reuniones de representantes de instituciones vinculados al tema migratorio, se debe trabajar aceleradamente en la mesa técnica interinstitucional del CAP instituida con un cronograma establecido para concluir labor este año.

Se sabe que han conocido diferentes casos que involucran adaptar una mejor atención del migrante dentro del marco de la actual pandemia de coronavirus, considerando en diferentes áreas, tal es el caso de la atención sanitaria para migrantes irregulares y refugiados.

Atención que de no realizarse, puede ser denunciada Guatemala ante Comisión Internamericana de Derechos Humanos (CIDH) por no brindar la asistencia en salud a los migrantes, lo que viola los derechos humanos en el tema de la salud.

Asimismo realizar la colocación de centros de vacunación, en los centros de recepción de retornados, como es en zona 13 para retornados vía aérea y el ubicado en San Marcos para retornados vía terrestre.

El trabajo interinstitucional que se debe realizar por representantes institucionales y efectuar en la mesa técnica establecida, debe permitir frutos para brindar una adecuada atención en servicios de salud y servicios, para los migrantes guatemaltecos retornados, como lo establece el Código de Migración.

En el caso de los retornados en 2019 y 2020 han sido 151 mil 84 personas vía terrestre y aérea, a quienes se dejó en deuda de atención adecuada.

Es lamentable que instituciones como el Consejo Nacional de Atención al Migrante de Guatemala (CONAMIGUA), así como la autoridad migratoria del país, no han desarrollado con dinamismo el compromiso hacia los migrantes, siendo una deuda pendiente por autoridades hacia los migrantes.