Una generación de Jehú y Joás se está levantando para restaurar
Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte. Apocalipsis 12:11
Tengo una palabra profética para aquellos que han crecido bajo la agenda demoníaca de Jezabel, y para aquellos que fueron criados en entornos narcisistas y lucharon contra eso toda su vida. Sí, el espíritu de Jezabel siempre ha tenido un objetivo en tu espalda por quien eres…Jezabel sigue apareciendo, manifestándose a través de diferentes personas, personalidades, temporadas, asignaciones y alineaciones para eliminarte. Ha sido la batalla batalla más grande de tu vida: descubrir cómo administrar tu llamado, cómo ser una voz en medio de ataques implacables y constantes intentos de cancelar tu llamado. Este espíritu ha intentado silenciarte, apagar tu voz, rechazarte, menospreciarte, aislarte y mantenerte encerrado en una cueva. Te ha tentado a suavizar tus palabras, diluir tu mensaje y disminuir tu fuego para que no sigas en su línea de fuego cruzado.
Conozco el precio que muchos de ustedes han pagado por ser pioneros en esto, por elegir la salud para sus familias, sus matrimonios y su futuro. Conozco el costo de negarse a tolerarla, temporada tras temporada, y lo que han atravesado por no renunciar a su llamado. Pero en los momentos más difíciles, elegieron el legado una y otra vez, y ha sido costoso.
Recientemente, estaba orando por esto, especialmente en mi propia vida, porque he luchado contra este espíritu durante tanto tiempo como puedo recordar, le pregunté al Señor: «¿Siempre será así? ¿Siempre tendré que luchar contra Jezabel?» Mientras leía 1 Reyes 19 – 2 Reyes 10, el Señor resaltó la historia de Jehú, quien derrocó a Jezabel (2 Reyes 9:30–37). Y el Señor dijo: «Tú eres Jehú. Esta generación es la generación de Jehú, levantándose para confrontar y derrotar a este espíritu».
Pero aquí está el asunto: Jehú derrocó a Jezabel, pero no reformó la tierra. 2 Reyes 10:31 “Pero Jehú no tuvo cuidado de seguir de todo corazón la ley del Señor, Dios de Israel, ni se apartó de los pecados con que Jeroboán había hecho pecar a Israel”. Derribó a la persona, pero no el patrón. Derrumbó el ídolo, pero no restauró el altar. Dejó un vacío, y ese vacío se convirtió en una puerta abierta. Ahora mismo, la prueba de nuestra generación no es solo señalar lo que está mal. Se trata de restaurar el sacerdocio, reconstruir el altar y llevar de nuevo a la Iglesia a una verdadera adoración. Porque sin adoración, Jezabel regresa.
Lo he visto en sueños repetidamente, Jezabel derrocada, solo para ser bienvenida de nuevo a través de espacios rotos, no sanados y desprotegidos. Porque donde no hay sacerdocio, no hay pureza ni presencia, ella vuelve para gobernar. Así que le pregunté al Señor: «¿Cuál es la clave?» Él dijo: «Joás». El nombre Joás significa «El Señor ha dado». El Señor dijo: «La generación de Joás y Joiada está sobre ti ahora». Esto es lo que significa: Jehú pudo exponer a Jezabel, pero fueron Joás y Joyadá quienes eliminaron su legado.
Atalía, la hija de Jezabel, se levantó al poder en Judá después de la muerte de Jezabel (2 Reyes 11:1–3). Ella fue una extensión generacional del espíritu de su madre. Pero el sacerdote Joiada preservó a Joás, escondiéndolo en el templo durante seis años. Cuando llegó el momento adecuado, derrocaron a Atalía en el templo (2 Reyes 11:13–16). Esto fue tan profético porque no solo confrontaron el fruto de Jezabel, la mataron en el lugar de adoración, como una declaración: «Estamos recuperando este lugar para el Señor». Luego lideraron un avivamiento de pacto y adoración en la tierra (2 Reyes 11:17–18), restaurando al pueblo de Dios a su verdadera identidad.Y esta es la batalla que tenemos hoy.No solo estamos enfrentando a Jezabel, estamos confrontando su legado, su influencia, sus fortalezas en familias, matrimonios, iglesias y sistemas.Pero no podemos detenernos en la exposición. Debemos reconstruir el altar, restaurar la presencia y modelar nuevamente el sacerdocio.
Pero aquí está la palabra para ustedes, los vencedores, los pioneros, los que se negaron a doblegarse: No están condenados a luchar contra Jezabel toda su vida. Dios está levantando una generación de Joás, hijos e hijas que el Señor ha dado, que verán y caminarán en el fruto de su persistencia en la batalla, porque se negaron a tolerar a Jezabel y han prevalecido. Ahora, debido a ustedes, la próxima generación no enfrentará lo que ustedes enfrentaron, porque lo confrontaron, lo derribaron y establecieron salud.
Pero aquí está la clave: Deben restaurar su hogar, su matrimonio, su mundo interior en un estilo de vida de adoración y los afectos correctos. Deben llenar el vacío con presencia y sacerdocio. Cuando lo hacemos, no solo desalojamos a Jezabel, cerramos la puerta para siempre. Y ese es Joás: vivir en el fruto de la victoria sin puntos de aterrizaje para el enemigo. No más ídolos. Compromisos. Otros amantes. SOLO JESUS NUEVAMENTE.
Así que la promesa para ustedes es esta: Están saliendo del cansancio. Están saliendo de la lucha interminable. Están saliendo de la cueva. Y están entrando en el fruto de la obediencia. Están a punto de ver surgir el legado en sus hijos. Van a ver a una generación caminar en paz donde ustedes han conocido la guerra. Porque eligieron luchar, ellos serán libres. Así que en los días venideros, observen cómo comienzan a ver FRUTO donde solo encontraron LUCHA, porque la marea está cambiando, los poderosos, ¡HAN VENCIDO! (Una palabra de Nate Johnston)
1 Juan 4:4 Hijitos, ustedes son de Dios, y han vencido a esos falsos profetas, porque mayor es el que está en ustedes que el que está en el mundo.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano