Terremoto 1

Guatemala recuerda 49 años del devastador terremoto de 1976

Hoy, 4 de febrero, se conmemoran 49 años del terremoto de 1976, un evento que dejó una profunda huella en la historia de Guatemala.

El desastre, que tuvo una magnitud de 7.5 grados, causó la muerte de al menos 23 mil personas y dejó más de 70 mil heridos, con efectos devastadores en la capital y varias regiones del país. Las zonas más afectadas fueron la zona 3 de la Ciudad de Guatemala, así como departamentos como Chimaltenango, El Progreso y Baja Verapaz.

En un contexto marcado por el conflicto armado interno, el terremoto exacerbó la tragedia, afectando gravemente tanto a civiles como a la infraestructura del país. El gobierno de la época, bajo la presidencia de Kjell Laugerud García, estableció el Comité Nacional de Emergencia (CONE) para coordinar la llegada de ayuda humanitaria, que llegó desde diferentes partes del mundo.

El terremoto de 1976 es recordado como una de las grandes tragedias de Guatemala.

Monseñor Mario Casariego, arzobispo de Guatemala, instó a la población a mantener la fe y la esperanza, mientras autoridades civiles y militares se volcaron en el apoyo a las víctimas y en la atención de los damnificados.

El impacto del terremoto cambió para siempre la fisonomía de las ciudades guatemaltecas, con el auge de la construcción con materiales más resistentes como el block, el cemento y el hierro, mientras los desplazados por el desastre comenzaron a poblar las periferias de la Ciudad de Guatemala.

Casi medio siglo después, el terremoto sigue siendo un recordatorio de la resiliencia del pueblo guatemalteco y del profundo cambio que significó para las generaciones que vivieron la tragedia.

Las nuevas generaciones, que no conocieron la catástrofe, siguen recordando el impacto de esos 35 segundos mortales que transformaron la vida de millones.