Magie de Cano

Cuando los Brazos de Mamá También Se Cansan

Hace poco vi un video de un malabarista.
Al inicio tenía tres pelotas en el aire… nada fuera de lo común.
Pero de pronto, alguien comenzó a lanzarle más objetos: un plato, un martillo, ¡hasta una silla!
Yo no podía creerlo.
Y pensé: así se siente ser mamá muchas veces.

Una pelota es el trabajo.
Otra, los hijos.
Otra, el matrimonio.
Otra, las cuentas.
Otra, tu propia salud… y casi siempre, esa es la que más se tambalea.

Y cuando parece que por fin vas a lograr un respiro, alguien lanza otra pelota más: un diagnóstico, una nueva responsabilidad, un problema inesperado.

Seguimos.
Malabareando.
Sonriendo.
Convencidas de que “no puedo soltar nada, no puedo fallar”.

Pero, querida madre, hay algo que quizá olvidaste:
No tienes que sostenerlo todo tú sola.

Jesús lo dijo con claridad:

“Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.” — 1 Pedro 5:7

Y fíjate en esto: el versículo no dice “cuando puedas con menos cosas, échalas sobre Él”… dice “toda vuestra ansiedad”.
Es decir, hasta esas pelotas que hoy parecen imposibles de sostener tienen un lugar en Sus manos.

Y mientras lees esto, quiero que hagamos una pausa.
Porque no se trata solo de entender el versículo con la mente… sino de dejar que descanse en tu corazón.
Por eso quiero orar contigo:

Señor, oro hoy por cada madre que siente que todo está a punto de caerse. Que vive cansada, con responsabilidades que parecen multiplicarse. Pon en sus manos tu paz. Enséñale a discernir qué cargas le corresponden y cuáles debe dejar en las tuyas. Dale descanso en su mente, nuevas fuerzas en su cuerpo y gozo en su espíritu. Que sepa que no está sola en este circo de la vida, porque Tú la sostienes.
Amén.

Querida madre, si mientras leías y orabas sentiste que esta es tu vida, quiero recordarte algo: no estás sola, y no tienes que malabarear eternamente.

Una madre de rodillas es ese recordatorio diario de que tus manos no siempre pueden con todo… pero tus rodillas siempre abren el cielo.

Es un recurso pensado para madres como tú, que cargan demasiado y necesitan recordar cada día que hay un Dios que sostiene lo que parece imposible.

Descúbrelo en unamadrederodillas.com y permite que el Señor tome en Sus manos lo que hoy amenaza con caerse.