El gobierno quiere retomar el control del Sistema Penitenciario (SP) y reducir la criminalidad dirigida desde el interior de las cárceles. Ahora el Ministerio de Gobernación (Mingob) ha anunciado un proyecto de renovación en cuatro centros penitenciarios para 2025.
La propuesta sigue el modelo implementado en el Centro de Detención de Máxima Seguridad para Hombres Renovación I, conocido anteriormente como «El Infiernito», en Escuintla.
El ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, explica que este proyecto de modernización es «solo el principio de muchas acciones» que buscan restaurar la seguridad y el orden dentro de las cárceles del país.
Jiménez dice que el modelo de Renovación I será la base para implementar nuevas medidas de vigilancia y control en otros recintos, incluyendo los de Zacapa y Petén, mientras que dos cárceles adicionales están bajo análisis para su posible renovación.
En Renovación I, donde recientemente fueron trasladados 131 reclusos vinculados a redes de extorsión y secuestro, se ha implementado un sistema de vigilancia que incluye cámaras de monitoreo constante, eliminación de conexiones eléctricas no autorizadas y estrictos controles de ingreso.
Los internos, ahora uniformados de color naranja, están sujetos a protocolos que limitan las visitas familiares y legales, las cuales serán monitoreadas para evitar el ingreso de ilícitos.