Un tiempo de división y decisión
Dejen que crezcan juntos hasta la cosecha. Entonces diré a los segadores: Recojan primero la mala hierba y átenla en manojos para quemarla; después recojan el trigo y guárdenlo en mi granero. Mateo 13:30
El domingo 17 de noviembre de 2024, tuve una visión de un campo siendo cosechado por una enorme cosechadora. Al acercarme al campo, pude ver que más de la mitad no estaba lleno de trigo, sino de maleza. Y dije: “Señor, ¿qué es esto? ¿Qué estamos viendo?” Ya lo sabía, me di cuenta de que estaba viendo la cizaña entre el trigo.
Comencé a sentirme desanimado al ver que en realidad había tanta maleza. Esta no es la gran cosecha que creí que vería en mi vida. Y el Señor me dijo: “No, esta es la cosecha antes de la cosecha. Este es el tiempo de división que trae arrepentimiento y una decisión para el cuerpo de Cristo, para que la próxima cosecha en la que entremos sea la gran cosecha que fue profetizada”.
Fue entonces cuando vi la cosechadora triturar las malezas y convertirlas en abono para el suelo. Y sentí que el Señor decía: “Pero este será uno de los tiempos más fructíferos, porque las malezas que han estado trabajando contra el trigo todo este tiempo ahora serán usadas como fertilizante para la cosecha”.
Este no es un tiempo para temer, aunque las cosas de repente se sientan más divididas, porque no es un tiempo de polarización o división de la iglesia, sino de traer a aquellos que no han estado dando fruto—y que han estado escuchando la voz del enemigo—a un tiempo de gran decisión.
“¿Me elegirán a Mí, o elegirán al hombre? ¿Seguirán a Jesús, o seguirán otra versión de Jesús?” oí decir al Señor. Amigos, creo que ahora podemos mirar la división que nos rodea en la tierra como algo negativo, o podemos verla como parte de una cosecha que nos está llevando y señalando hacia la gran cosecha que ha sido profetizada. No es un tiempo para desanimarnos ni para colgar nuestras herramientas. No es un tiempo para dejar de hablar o para dejar de avanzar. Es, en realidad, un tiempo para celebrar y prepararnos porque Dios nos está guiando hacia la gran cosecha.
Vamos a ver una increíble cosecha de almas en los días venideros. Creo sinceramente que este es el tiempo en que el Señor está diciendo: “¡Preparen el granero! ¡Preparen el granero para lo que estoy a punto de derramar!” No presten atención a los críticos o a los pesimistas. No miren a aquellos que están profetizando condenación y oscuridad, porque Dios no ha terminado con América, y no ha terminado con las naciones.
Aunque habrá una gran tensión y choque de ideales y reinos, esta será la sacudida que despierte a la iglesia y la ponga en el lugar correcto. Hechos 2 ya está sobre nosotros, y nuestros mejores días están por venir. (Una palabra de Nate Johnston)
Juan 4:35 ¿No decís vosotros: Aún faltan cuatro meses para que llegue la siega? He aquí os digo: Alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano