discurso

Genera valor y persuasión en tus discursos y exposiciones

A la hora de pronunciarse ante la clase en un aula, estudiantes están preocupados por hacer llegar el mensaje de su tema y dejan por un lado la finalidad de que este cale hondo en sus compañeros. Es decir, se enfocan solo en dar el mensaje y no hacer que este sea útil para los demás.

Por eso, es importante que a la hora de exponer un tema, la finalidad sea que ayude a otros a obtener nuevos conocimientos a la vez que al mismo expositor aprender. Recuerda que quien enseña correctamente un tema, lo aprende dos veces. Toma en cuenta estos consejos puntuales.

Comienza por lo más importante

No pierdas tiempo en presentarte o dar las gracias. Comienza explicando lo más importante de una forma relevante y creativa, no te olvides que tu mensaje debe ser potente desde el inicio.

Di lo justo

Nadie está obligado a ponerte atención. Esta te la debes de ganar. Un buen método es ser puntual y ensayar antes las palabras correctas y precisas. No cometas el error de decir palabras innecesarias solo para ganar tiempo. Un buen mensaje es aquel, que corto y conciso, dice más que mil palabras mal tejidas.

Apóyate del lenguaje corporal

No seas rígido a la hora de hablar. Por lo regular, la atención se genera cuando hay movimiento en el interlocutor. Utiliza tus manos, tus gestos, incluso el tono de tu voz para hacer que tu mensaje sea dinámico, entretenido y entendible.